¿Cómo se hace una pecera?
Mucha gente encuentra más cómodo tener peces que gatos o perros, y tienen razón. Este tipo de animales requiere muy poco mantenimiento y atención mientras contribuyen a la decoración de la habitación. Así que si has decidido dar el paso, aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a la hora de montar tu tanque.
Saber en qué te estás metiendo
Incluso antes de ordenar su acuario, vale la pena señalar que no todos los modelos funcionarán para todos los peces y plantas. Dependiendo de la especie, su tamaño, su estilo de vida, tendrás que seleccionar cuidadosamente los componentes del miniestanque.
Es obvio que el tamaño de su tanque dependerá del tamaño de sus animales, y especialmente de su número. Un pequeño pez adulto de unos 5 cm. necesitará 5 litros de agua. Así que haz tus cálculos desde esta base. Si es de 10 cm o más, no bajes de unos 50 litros por persona.
Reuniendo las necesidades
Además del tanque, la fauna y la flora, un acuario digno de ese nombre está constituido por un equipo eléctrico destinado a mantener, por ejemplo, la temperatura viable en su interior (por lo tanto, un calentador), la bomba que debe distribuir el oxígeno junto con su manguera, la válvula antirretorno, el difusor y, por supuesto, el indispensable filtro dedicado al mantenimiento y al cambio del agua.
Cuando compre la iluminación, preste mucha atención a la potencia. Y un pequeño consejo al comprar, evita los artículos que se venden en kits baratos. Se gana más comprando un filtro externo en lugar de uno montado en la pared de cristal. También se necesita una red de aterrizaje para sacar a los peces de allí en caso de incidente o mantenimiento. No olvides la comida para los recién llegados.
Reglas que deben ser respetadas
El pH del agua es muy importante y varía dependiendo de la familia de peces que tengas a mano. Los characidos, Cyprinodontidae y los cíclidos americanos sólo viven en agua dulce con un pH inferior a 7. El agua media (es decir, entre 5,6 y 8,96) es mejor para los ciprínidos y los laberínticos. El resto (Pez Gato, Ciclidos Africanos y Poecilios) prefieren aguas duras con un pH superior a 7.
No vacíe la bolsa en la que se guardaron los peces directamente en el agua del tanque. La diferencia de temperatura, especialmente en el caso de los patines y los rayos, puede provocar la muerte súbita de estos animales. Por lo tanto, dejen que el plástico se empape durante una media hora antes de abrirlo y verter un poco de agua de acuario y luego cerrarlo de nuevo. Repite la operación dos veces en una hora y luego puedes liberar al animal.
Si tus peces no comen, no te sorprendas, les lleva un poco de tiempo adaptarse a su nuevo entorno.
¿Dónde debería poner mi acuario?
La elección de la habitación en la que instalar el tanque no es realmente un problema: dormitorio (si se puede soportar el ruido de la bomba), pasillo o sala de estar, todos son adecuados para este último siempre y cuando sean lo suficientemente espaciosos para acomodarlo. Sólo asegúrate de que esté lo más lejos posible de las aberturas (puertas y ventanas de cristal) para que la luz del sol no pueda entrar. De lo contrario, esto fomentará el crecimiento e invasión de algas en el acuario. Si la luz artificial perturba a los peces, siempre puede cubrir el frasco de vez en cuando.
No lo levante deslizando los pies por los cuatro lados. La parte media podría ceder bajo el peso del agua o deformarse. En su lugar, coloque el accesorio en un mueble e inserte una lámina de poliestireno de 1 cm entre los dos. Esto reducirá las vibraciones.
Decora el acuario
Contrariamente a la creencia popular, el agua sólo llega al final cuando llenas un acuario y los peces que están muy lejos. Al principio, espolvoreas la base con piedras, arena, sustratos. Empaca y moja un poco si es necesario. Construya capas de 5 a 10 cm o más según sus preferencias. También puedes poner capas más gruesas en algunas partes para formar una colina y menos en otras para hacer un hueco.
Una vez que tengas tu suelo, planta tu vegetación natural o artificial en él. No sobrecargue el acuario. Los residentes deben tener espacio para nadar libremente, esconderse o descansar y jugar. Asegúrate de cumplir con estos requisitos. Asegúrate de que todo esté limpio y claro antes de meterlo dentro, incluyendo la arena.
Evitar ciertos errores
Ya en el momento de la compra, recuerde siempre dejar un margen de 50 l al seleccionar el tamaño de su acuario. No olvides la capa de sustrato y las plantas que se ensuciarán en el suelo.
Cuando llegue el momento de llenar el tanque, una vez que todo esté en su lugar, tómalo con calma. Coge una botella de plástico con un agujero (como una mini regadera) para rociar el interior del tanque con una lluvia fina. Esto no sólo le evitará hacer antiestéticos agujeros en el suelo, sino que también mantendrá todo en su lugar hasta que se alcance el nivel requerido. Luego espolvoreas algo de comida en la superficie y voilà.
Ten cuidado de no arrojar tus peces inmediatamente cuando el acuario esté lleno de agua. Hay que esperar hasta que el suelo y las plantas nutritivas produzcan las sustancias necesarias para la supervivencia de los futuros habitantes, como los nitratos. Este proceso toma alrededor de un mes, pero incluso antes de introducir tu especie, harías bien en medir el pH del agua para ver si el camino está despejado.
Cuando libere a sus peces en el tanque también, hágalo gradualmente (en grupos de 3 cada 10 días) para evitar una fuerte acumulación de nitritos, que es peligrosa para su salud.
Mantener su acuario a largo plazo
No se usa cualquier producto de limpieza para limpiar el acuario. Hay bacterias y activadores para este propósito. También necesitará acondicionadores de agua adecuados y pruebas de pH y nitrato. Si eliges comprar tu acuario en lugar de hacerlo, tienes aquí una lista de las mejores ofertas.